Historia
Henri de Saussure pudo haberla descubierto en 1855. Nicolás León, con
base en lo publicado por Saussure, visitó la zona a principios de siglo e hizo
una completa descripción de las estructuras.
En 1938, Paul Gendrop visitó el sitio y determinó que Cantona ocupa una
extensión de 15 kilómetros cuadrados y opinó que había numerosos recintos
rectangulares de 20 a 30 metros de largo por 12 a 20 metros de ancho,
delimitados por gruesas paredes de piedra, bastante rectas y bien conservadas.
En 1958, Eduardo Noguera hizo estudios tentativos de la cerámica y
construcciones y la ubica, cronológicamente, en el periodo Preclásico (200 a
100 a.C), lo que coincide con la información de entonces.
En 1980, con base en fotografías aéreas, la arqueóloga Diana López de
Molina hizo un croquis del sitio y se hicieron sondeos estratigráficos, para
proponer una cronología tentativa a la ocupación de la zona.
Los estudios hacen suponer que esta ciudad prehispánica fue ocupada desde el Preclásico Superior (200 a. C.) hasta el Clásico Temprano (0 a 200 d. C.), lo cual haría de ella una de las ciudades más antiguas de México.
Los estudios hacen suponer que esta ciudad prehispánica fue ocupada desde el Preclásico Superior (200 a. C.) hasta el Clásico Temprano (0 a 200 d. C.), lo cual haría de ella una de las ciudades más antiguas de México.
El auge de Cantona probablemente ocurrió entre los años 600 y 1000
d.C., y coincide con la caída de las principales urbes del horizonte Clásico.
Existen opiniones de que pudo haber afectado a Teotihuacan, al obstruir rutas
de comercio de la costa al Altiplano.
Origen
Las controversias sobre el origen de este sitio empiezan con el nombre.
Oficialmente se conoce como Cantona, regionalmente incluso como Caltonac, que
pareciera provenir del náhuatl calli, casa, y tōnatiuh, sol, "casa del
sol". Esta etimología es improbable, no obstante, ya que contraviene las
normas lingüísticas del náhuatl.
Aún es un misterio qué cultura construyó y habitó esta ciudad, aunque
se piensa que su principal actividad económica probablemente era la fabricación
de artículos de obsidiana y su comercio, por tratarse de un material muy
codiciado. Se han identificado 27 canchas de juego de pelota.
La ciudad en general es asimétrica, una característica que hace de ella
una urbe única en Mesoamérica. Se piensa que tuvo limitaciones de agua, lo cual
no impidió el desarrollo impresionante de esta ciudad.
La Plaza de la Fertilidad, llamada así por las esculturas fálicas
descubiertas (hay dos hachas votivas), es considerada un importante hallazgo.
Se estima que la caída de Cantona ocurrió entre 950 al 1000, y que en 1100 fue
abandonada totalmente. Se desconocen las causas.
Importancia
Cantona a diecisiete años de haber sido abierta al público, apenas
inicia su proceso de crecimiento una vez que ha logrado consolidar la
infraestructura necesaria para su despegue (vías carreteras, energía eléctrica,
suministro de agua, mayor seguridad y calidad en el servicio, entre otros);
siendo así que durante este 2012 cerraremos el circulo de información y
conocimiento sobre esta ciudad prehispánica a través de la conclusión y
apertura del Museo de Sitio en Cantona.
Bajo esta perspectiva podemos asegurar que Cantona seguirá siendo factor primordial en el desarrollo socioeconómico, no sólo de la región sino del Estado de Puebla.
Bajo esta perspectiva podemos asegurar que Cantona seguirá siendo factor primordial en el desarrollo socioeconómico, no sólo de la región sino del Estado de Puebla.
Localización
A partir de la Ciudad de Puebla, es necesario tomar la Autopista No.
150 (México-Veracruz) en dirección oriente, donde a la altura del poblado de
Amozoc se debe tomar la Carretera Federal No. 129 (Puebla-Teziutlán) hacia el
norte, hasta llegar al poblado de Oriental. Desde este sitio se debe continuar
por la carretera que conduce a Tepeyahualco, punto donde se desprende el camino
que dirige a la zona arqueológica. De igual forma, es posible arribar al sitio
desde el estado de Veracruz, partiendo del poblado Perote. En este punto se
debe tomar la Carretera Federal No. 140 hacia el suroeste, transitando
aproximadamente 22 kilómetros, para después tomar la desviación hacia el
poniente que conduce a Tepeyahualco, desde donde se recorrerá la distancia
anteriormente señalada…
Referencia: