Juan Francisco Rodríguez Montoya

Juan Francisco Rodríguez Montoya, conocido como Juan Soriano (Guadalajara, México, 18 de agosto de 1920-Ciudad de México, México, 10 de febrero de 2006) fue un artista plástico mexicano, llamado "El Mozart de la Pintura", debido a
que desde temprana edad demostró grandes aptitudes para la creación plástica.
A la edad de
catorce años montó su primera exposición colectiva mientras participaba en el
taller de Francisco Rodríguez. Lola Álvarez Bravo, José Chávez Morado y María Izquierdo llegaron
a la exposición que había quedado bajo el resguardo de Soriano; cuando le
preguntaron de quién eran unas pinturas ahí expuestas, el joven Juan respondió
que eran de él.
En ese momento, aquellos personajes lo convencieron de irse a
la Ciudad de México para mejorar su técnica, ya que calificaron su obra como
"interesante". Siendo adolescente, en 1935 se afincó en la Ciudad de
México para estudiar artes plásticas, motivado
por su talento y el aliciente de la compañía de su hermana Martha. Sus mentores
fueron grandes exponentes de la plástica mexicana como Emilio Caero y Santos Balmori.
Por invitación de este último, se integró a
la Liga de
Escritores y Artistas Revolucionarios (LEAR) en la cual
permaneció apenas un par de años; sin embargo, a partir de ello se relacionó
con conocidos personajes del ámbito cultural, lo cual le permitió ampliar sus
horizontes intelectuales y plásticos.
Entre estas amistades se cuentan al
maestro Alfonso Reyes, Juan Rulfo, Dolores del Río, María Félix, Octavio Paz, Rufino Tamayo, Guadalupe Marín, Xavier Villaurrutia, Elena Garro, Lola Álvarez Bravo, María Asúnsolo, Leonora Carrington, Carlos Pellicer, María Zambrano, Ignacio Retes, Salvador Novo, Frida Kahlo, Carlos Mérida, y Antonio M.
Ruiz, El Corcito, entre otros.
A principio de la década de los cincuenta, viajó
a Europa, ahí, conforme fue madurando su obra, amplió su círculo
de amistades internacionales, lo que contribuyó a que su estilo plástico se
consolidase.
De 1952 a 1956 retornó brevemente al país para
retomar sus vínculos con intelectuales mexicanos y colaboró con Octavio Paz, Juan José Arreola, Héctor Mendoza, Juan José Gurrola y Leonora Carrington dentro
del grupo de teatro experimental "Poesía en
Voz Alta" que tuvo 8 programas en la segunda mitad de la década
de los 50 y principio de los 60.
Diseñó la escenografía y el vestuario para
varias de sus producciones como el sexto programa: Las criadas (1947)
de Jean Gennet que se presentó en el Teatro Fábregas en 1963. De 1956 a 1957 se estableció en Roma, Italia, para después, a partir de 1974, cambiar su residencia
a París, la cual a la postre visitaría asiduamente, después de
volver a afincarse en la ciudad de México.
Ahí conoció y trabó amistad
con Antonio Saura, Julio Cortázar y Milan Kundera. Su obra se distingue por haber desarrollado un estilo
propio, basado en el lirismo y una búsqueda constante, derivada de la inquieta
personalidad del creador. Experimentó con diversos materiales, géneros y
estilos; incursionando incluso en el abstraccionismo y la creación de
vestuarios y escenografías para teatro.
En el plano anecdótico, se recuerda que, cuando
dejaba de tener otra superficie para pintar, lo hacía sobre las puertas de su
casa, las cuales después vendía. En reconocimiento a su trayectoria, recibió diversos
premios tales como el Premio
Nacional de Ciencias y Artes en el área de Bellas Artes del
gobierno de México en 1987.
La Medalla de Oro del Palacio de Bellas Artes de México, la Condecoración de la Legión de Honor, en Grado de Oficial de Francia, la Mención Honorífica en el Festival Internacional de Pintura de Cagnes-sur-Mer en Francia, la Orden al Mérito de la República de Polonia y el Premio Velázquez de Artes Plásticas de España. Fue doctor honoris causa por la Universidad de Colima.
La última y prolífera etapa de su vida la vivió junto con su compañero Marek Keller, en su casa-estudio ubicado en el número 71 de la Av. Ámsterdam, casi esquina con Parras; hoy aquella fortaleza de concreto ha desaparecido, para dar paso a un edificio habitacional.
La Medalla de Oro del Palacio de Bellas Artes de México, la Condecoración de la Legión de Honor, en Grado de Oficial de Francia, la Mención Honorífica en el Festival Internacional de Pintura de Cagnes-sur-Mer en Francia, la Orden al Mérito de la República de Polonia y el Premio Velázquez de Artes Plásticas de España. Fue doctor honoris causa por la Universidad de Colima.

La última y prolífera etapa de su vida la vivió junto con su compañero Marek Keller, en su casa-estudio ubicado en el número 71 de la Av. Ámsterdam, casi esquina con Parras; hoy aquella fortaleza de concreto ha desaparecido, para dar paso a un edificio habitacional.
Fallece el 10 de febrero de 2006 a los 85 años de
edad en Ciudad de México. En las
fechas posteriores a su fallecimiento, ha trascendido que el gobierno español
reconocerá póstumamente el legado y trayectoria del artista, nombrándolo comendador
de la Orden de Isabel la Católica.
La última y
prolífera etapa de su vida la vivió junto con su compañero Marek Keller, en su
casa-estudio ubicado en el número 71 de la Av. Ámsterdam, casi esquina con
Parras; hoy aquella fortaleza de concreto ha desaparecido, para dar paso a un
edificio habitacional.
Fallece el 10 de febrero de 2006 a los 85 años de
edad en Ciudad de México. En las
fechas posteriores a su fallecimiento, ha trascendido que el gobierno español
reconocerá póstumamente el legado y trayectoria del artista, nombrándolo comendador
de la Orden de Isabel la Católica.
En el espacio público, se pueden hallar algunas de sus obras
descollantes: Paloma (Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey,
México), Ola (World Trade Center de Guadalajara, México), Luna (Auditorio
Nacional, Ciudad de México) y Sirena (Plaza Loreto, Ciudad de
México).
La Paloma
Escultura de
bronce de 6 metros de alto y 4 toneladas de peso, ubicada en la ciudad de
Colima, México. Otra copia de esta obra se encuentra en el museo MARCO de
Monterrey, Nuevo León.

La Luna
Se trata de una escultura monumental que mide diez metros de alto,
realizada a principios de los años 90s especialmente para ser instalada en el
ala izquierda de la explanada del Auditorio Nacional de la
Ciudad de México, todo esto a sugerencia del arquitecto Teodoro
González de León. La técnica usada para su realización es vaciado en bronce.
Ésta fue su primer obra escultórica monumental para la Ciudad de México.
Este trabajo es una representación surrealista de la luna, ya que agrega
elementos formales al ideal colectivo de cuarto creciente de luna.
Toda al obra presenta una textura rugosa, irrelular; similar a la
piedra, de color aqua-verdoso. Así mismo se pueden distinguir una serie de
elementos principales: cuarto creciente de superior e inferior, tronco, par de
horadaciones.
Los temas abarcados por esta obra están definidos tanto por el concepto
inicial que Soriano tuvo en mente como por el lugar donde se encuentra, la
explanada del Auditorio Nacional. Por encontrarse allí cubre temas sociales, ya
que está en un lugar público; quien sea puede verla, y hasta tocarla, sentirse
partícipe de la obra de arte.
Es uno de los elementos que saludan a la gente que va a presenciar un
espectáculo a tan reconocido recinto. Justo después de colocar La Luna en el Auditorio Nacional,
hubo opiniones de reprobación con la obra ya que la generalidad sostenía que no
representa la grandeza ni lo cosmopolita del recinto y la zona.
A lo que el
artista respondió: "La luna se asocia con todo. Es una de las imágenes más
llevadas y traídas por los poetas, los músicos, los bailarines, la religión, la
mitología".
Autor, entre
otras obras pictóricas, de María Asúnsolo en Rosa y Apolo y las
musas. También se interesó por la escultura monumental, entre cuyas obras se
recuerdan Pato, Pájaro Dos Caras, y Pájaro Con Semillas.

Apolo con peces
Apolo con peces, esta obra pertenece a Juan Soriano,
el cual relata plásticamente un soberbio contenido onírico, junto con la famosa
Muerte enjaulada, Tres mujeres, Retrato de Marek y La palmera.
Apolo, para la tradición grecolatina, era protector
de las letras y las artes. Soriano recrea el mito en la figura de un hombre
joven y portentoso, acompañado de la lira, su principal atributo, la cual
producía una música tan dulce que era capaz de adormecer a las bestias y hacer
brotar agua de las piedras.

La muerte enjaulada
Acuarela sobre papel, pintado en 1983. Esta obra
pertenece a la colección Marek Keller.

Museo Morelense de Alto Contemporáneo “Juan
Soriano”
El Museo Morelense de Arte
Contemporáneo “Juan Soriano” en Cuernavaca, Morelos, abrió sus puertas en junio
2018 para promover el arte moderno y contemporáneo, convirtiéndose en una
opción para recibir exposiciones nacionales e internacionales.
Se construyó con una inversión de $300 millones de
pesos,dentro del primer cuadro de la ciudad de Cuernavaca, como un espacio que
fomenta la cohesión y el desarrollo social, por medio del arte y el disfrute
del espacio público, fortaleciendo así a la comunidad.
Mantiene la exposición permanente del artista Juan
Soriano, dicho acervo cultural está integrado por 1,200 obras entre óleos,
esculturas, esculturas de plata, gobelinos (tapiz), cerámicas y obra gráfica,
así como decenas de grabados y carteles, cientos de dibujos y fotografías.
El "Museo Morelense de Arte Contemporáneo Juan
Soriano” se suma a un importante patrimonio cultural con el que cuenta Morelos,
y que antes no se tenía para el arte y la cultura como el Centro Cultural
Teopanzolco, el Centro de
Desarrollo Comunitario “Los Chocolates” y la Academia de Música
Benning, ubicada en la Antigua Estación del Tren en Cuernavaca.

Además de otros proyectos como la rehabilitación del
Centro Cultural Jardín Borda y el embellecimiento del primer cuadro de la
ciudad con el proyecto de Ecozona, que fomentan las actividades artísticas –
culturales.
Con estas obras, Morelos se convierte por su nueva
infraestructura cultural en uno de los destinos para las artes y cultura más
importante del centro del país.
Documental del Pintor Juan Francisco Rodríguez Montoya
Referencia:
Wikipedia
Wikipedia
Publicar un comentario con Facebook O Google