El esfuerzo para trabajar en este cenote comenzó en 2005 cuando la
gente del pueblo de Yokdzonot (población 750) se dio cuenta de que necesitaba
encontrar nuevas formas de ganar dinero, porque trabajando en las milpas ya no
era suficiente. Con su privilegiada ubicación tan cerca de Chichén Itzá y el
conocimiento de que otros cenotes en área están abiertos a visitantes, les dio
la idea de hacer lo mismo con el cenote en su pueblo.
Cincuenta mujeres Mayas del pueblo se reunieron y en una manera muy
inteligente formaron una cooperativa y recibieron una concesión de 50 años en
el cenote y la tierra a su alrededor. Luego obtuvieron ayuda e información de
un arquitecto para construir los baños, la cocina, restaurante de palapa, y
caminos de madera y escaleras al agua. Esto fue un esfuerzo.
Cada día por dos años, a las 3 pm, después de realizar sus labores
domésticas, cocinar, y traer sus hijos de la escuela, fueron a la tierra a
trasladar piedras, pequeñas y grandes, para formar los caminos, podar la
vegetación y árboles vivos, quitar años de basura, y construir una valla bonita
alrededor del área.
Esta fue una labor muy dura. Durante el transcurso de dos años, muchas
mujeres se desanimaron y abandonaron el proyecto. La labor fue físicamente dura
y no compartieron el sueño de las otras mujeres.
Cuando inauguraron el cenote en enero de 2007, había 17 mujeres en la
cooperativa, cuya membresía es heredable, asegurando que el espacio de cada
mujer puede pasar a uno de sus hijos.
Localización
El cenote Yokzonot está ubicado a 26 kilómetros de piste, en el tramo entre Valladolid y Mérida. Km 100 de la carretera 180.