Los trajes típicos de Puebla que se preservan hasta el
presente son una muestra de la importancia de las culturas originarias en el
ciudadano actual, con especial énfasis en las culturas regionales.
El estado de Puebla pertenece a la treintena de estados que
conforman la nación mexicana. Su capital es la ciudad de Puebla, la cual ha
representado históricamente un punto de tránsito entre las costas orientales
del Atlántico y la capital mexicana.
Puebla es uno de los estados más ricos a nivel cultural.
Esto se demuestra a través de manifestaciones como la historia, la gastronomía,
las festividades y las artesanías.
Entre estas manifestaciones destacan los textiles o vestimentas
que llevan los habitantes locales para resaltar su colorida herencia milenaria.
La importancia histórica de Puebla le ha dado un mayor nivel
de exposición frente a otros estados de México.
Su cercanía con la capital es otro factor influyente.
Actualmente es el cuarto estado más poblado a nivel nacional y uno de los más
atractivos en cuanto al turismo.
Las prendas más populares suelen llevarlas las mujeres,
quienes suelen utilizarlas solo en ciertas celebraciones formales.
Algunos conjuntos textiles masculinos han cobrado
popularidad con el paso del tiempo, llegándose a considerar propios de Puebla.
Los trajes más representativos del estado de Puebla han sido
desde hace años el de la china poblana y su acompañante, el hombre poblano.
A pesar de la variedad regional del estado, esta
manifestación textil ha permeado todas las regiones para alzarse como un
conjunto poblano, único y sin comparación.
Puebla tuvo por mucho tiempo las cualidades de una región
agraria, por lo que sus habitantes se acostumbraron al uso textil sin mayores
estándares estéticos.
Los poblanos buscaban usar ropas que pudiesen aguantar el
arduo trabajo diario que representaba el campo.
La alta influencia española en los tiempos de la Conquista
puede no haber permitido que ciertas manifestaciones textiles aborígenes
perduraran hasta la época actual.
Estas piezas han adquirido una gran importancia debido al
valor histórico que han obtenido y a las historias alrededor de su
popularización.
Otros vestigios textiles, como los trajes elegantes que se
usaron durante distintas épocas, han perdido su importancia. Los poblanos se
han decantado por conjuntos pintorescos que reflejen la variedad que refleja
Puebla.
Vestido de china poblana
Es considerado el conjunto femenino más representativo, no
solo de la ciudad de Puebla sino de todo el estado.
Sus portadoras pueden verse en muchos sitios, siempre
llamativas ante la delicadeza y atractivos colores que reflejan estas prendas.
Tiene una gran carga histórica, la cual le vale su renombre
entre los habitantes. Está compuesto por varias piezas y es un traje que
utilizan gran cantidad de mujeres poblanas, sin importar su edad.
El atuendo de china poblana fue considerado uno de bastante
elegancia, en un tiempo en el que la mayoría de los habitantes de la ciudad
eran campesinos y sus ropas reflejaban su contante contacto con el trabajo
agrario.
En cambio, las mujeres poblanas históricamente se han visto
representadas vistiendo llamativos vestidos que en nada se asemejan a las
rasgadas ropas campesinas.
El conjunto consta en la parte superior de una blusa blanca
y escotada, también conocida como blusa poblana, que deja al descubierto
hombros y parte del pecho de la mujer.
Esta blusa cuenta con gran cantidad de detalles bordados en
seda: patrones florales o geométricos de diversos colores.
La parte inferior se compone principalmente de una larga
falda llamada castor, dividida en dos secciones: la superior, llamada corte,
está hecha de percal verde; y la inferior puede ser roja y acompañada de otros
patrones de colores.
Para algunas celebraciones tradicionales, a estas faldas se
les agregan lentejuelas y otros accesorios.
A estas piezas principales las acompañan una banda de color
que sostiene la falda, un rebozo y un calzado raso bordado con hilos de seda.
En ocasiones se agregan otros accesorios para rostro, pecho
y manos, como abalorios y joyas.
Gran parte de las piezas que componen la vestimenta de china
poblana tienen connotaciones emocionales según las tradiciones.
Por ejemplo, se decía que toda mujer que llevara su calzado
de china poblana, raso y con hilos de seda, debía ser considerada una mujer
alegre.
Traje poblano de hombre
La tradición ubica a la china poblana siempre acompañada de
un hombre, un varón poblano que también llevaría vestimentas típicas de la
región que se han popularizado y se mantienen latentes hoy en día.
El varón que acompañe a la china poblana debe brindar un
contraste bastante claro entre los atuendos, sin dejar de ser armónico.
Se compara el aspecto del hombre poblano con el de los
tradicionales charros. Sin embargo, son detalles en el traje lo que los
diferencian.
Consta de una camisa ornamentada, cuyos patrones y colores
pueden variar aunque siempre mantienen su intensidad.
Llevan una faja en la cintura que suele combinar con la de
la mujer, y unos pantalones acampanados que suelen ser negros o armónicos con
las piezas superiores. Encima usan un paliacate o pañoleta amarrado a la
cabeza.
Aunque se comparen con los charros, los poblanos no llevan
como parte de su atuendo ornamentos visuales y sonoros como cascabeles.
Un gran aspecto a destacar en cuanto a tradición cultural,
es el carácter siempre doble que se le da a la china poblana, la cual no se
concibe entera sin su pareja poblana.
Este conjunto de china poblana y acompañante masculino puede
observarse en gran cantidad de celebraciones y festividades a lo largo y ancho
del estado de Puebla.
Aunque en algunas regiones pueden verse jóvenes mujeres que
vistan llamativas blusas y faldas, el alto nivel de detalles y formalidad
cultural atribuidos a estos conjuntos hacen que se manifiesten en las ocasiones
más especiales.
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